BÚSQUEDA
Búsqueda.
Ahora en la calle,
aprieto los puños,
aprieto mis piernas,
acelero, me concentro
en un punto,
en una pista endiablada.
En un agujero sin negro,
en un agujero vespertino,
en una catarata,
en una ráfaga.
Esa que no me suelta.
¡ Camino, huyo!
por la calle de piedra
desgastando mis piernas,
mis músculos.
Y mi alma serena
se pierde, se dispersa,
me abandona.
¿ Camino ?, ¡ no !
corro con la mente.
¿ Hacia donde ?.
No hay respuesta.
¡ Qué locura centrifugadora !
Furioso por la calle,
sin acera ni techo,
sin hoguera,
paseo locamente
como una marioneta
entre dos hilos,
dos hilos que me atormentan,
que me ciegan.
21 de marzo de 2006
Ahora en la calle,
aprieto los puños,
aprieto mis piernas,
acelero, me concentro
en un punto,
en una pista endiablada.
En un agujero sin negro,
en un agujero vespertino,
en una catarata,
en una ráfaga.
Esa que no me suelta.
¡ Camino, huyo!
por la calle de piedra
desgastando mis piernas,
mis músculos.
Y mi alma serena
se pierde, se dispersa,
me abandona.
¿ Camino ?, ¡ no !
corro con la mente.
¿ Hacia donde ?.
No hay respuesta.
¡ Qué locura centrifugadora !
Furioso por la calle,
sin acera ni techo,
sin hoguera,
paseo locamente
como una marioneta
entre dos hilos,
dos hilos que me atormentan,
que me ciegan.
21 de marzo de 2006
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