CANCIÓN DEL MAR PARA ELLA

CANCIÓN DEL MAR PARA ELLA


Fina brisa de celeste
es tu pelo,
fina brisa,
fino viento.

Yo tengo en mis manos,
cuando te beso,
toda la longitud
de la playa,
toda la curvatura amplia
del deseo.

En tu boca se dibuja,
se escribe,
un rayo de luz,
que por la lente cóncava
de tu mirada
quema mi pecho.

Te entrego
en tu mano abierta
un regalo del mar,
una concha irisada,
un trozo de piedra
pulida por la ola,
amansada por el agua,
redondeada.









E inclinándome
de rodillas,
beso la arena,
cultivándola en exceso,
con el almíbar sobrante,
con el dulzor
de tus besos.

Hasta llenar la tierra
de la espesura roja
de tu aliento.

En Sevilla, 15 de abril de 1999.